La piel juega un papel muy importante en nuestro cuerpo ya que nos protege de las agresiones externas, por eso, cuidarla y protegerla es fundamental . Es necesario en todas las edades y en todas las estaciones del año, pero cada etapa necesita unos cuidados específicos.
A medida que envejecemos, la piel experimenta cambios:

■ La pérdida de colágeno, lo que favorece la aparición de manchas y arrugas.
■ Baja la producción de melanocitos, esto hace que la piel está más expuesta al sol.
■ Bajan las glándulas sudoríparas, lo que provoca que la piel se reseque.
■ Y hay una pérdida de recepción de la temperatura, lo cual hace que se pierda la sensación de frio y calor.

La piel es un órgano muy sensible y las personas mayores requieren un cuidado especial, para esto es necesario seguir unas pautas :
■ Es preciso hidratar la piel, por eso es necesario beber al menos dos litros de agua al día y utilizar cremas hidratantes .
■ Cobra un papel muy importante también la higiene personal, es importante el aseo frecuente y para las personas mayores es aconsejable el aseo con gel de pH neutro
■ También hay que proteger la piel del sol, utilizando  cremas con protección solar para la cara y las manos.
■ Cobra un papel fundamental la alimentación, es importante una alimentación sana y equilibrada. Además de beber abundante agua hay que comer frutas y verduras, estás tienen grandes beneficios para la piel. 
■ El pescado azul es un buen aliado por su aporte en vitamina D, el brócoli o cítricos para aportar vitamina C , zanahorias para proteger la piel, o frutos secos por su función antioxidante.

Y en último lugar señalar la importancia de la  prevención, es necesario vigilar y supervisar la piel diariamente por la posible aparición de manchas o cualquier irregularidad , siempre es muy importante detectar a tiempo cualquier anomalía para poder zanjarla.